Fuentes Primarias...

Normalmente en el día a día lidiamos sin darnos cuenta con una diversidad de olores y aromas,  de los cuales no somos conscientes, sin embargo, nuestro olfato capta,  el cerebro registra y archiva.

Todo esto ocurre en milésimas de segundos a través del subconsciente, no obstante, cuando nos damos la oportunidad de hacer un alto en nuestra ajetreada vida y respiramos conscientemente a nuestro alrededor,  podemos percibir cualquier variedad de olores, desde los mas agradables y sublimes hasta otros no tan placenteros pero que están allí...

Esta es la principal razón por la que hablo de olores y no solo de fragancias o aromas, lo cual es muy común confundir, pero recuerden que olor es un concepto general, que habla de la percepción de emanaciones químicas volátiles a través del olfato, sin hacer diferencia entre agradables y desagradables, en cambio el termino aromas y fragancias se utiliza mas para definir esencias comerciales y sobre todo  la gran diferencia entre un termino u otro, agradables al olfato..

Casi siempre,  identificamos  marcas y fragancias comerciales  como la fuente primaria de las mejores estelas de perfumes, sin recordar que la base principal esta en la naturaleza quien en su infinita bondad y creación, se ha encargado de nutrir nuestro mundo de las mas excelsas y agradables fragancias. Tristemente,  hoy en día se necesita la inocencia de un niño para reconocerlo, pues solo ellos aun tienen curiosidad por la naturaleza y las cosas que os rodean,  para los adultos casi siempre pasa desapercibida.

En estos tiempos, pocas son las personas que se permiten oler directamente una rosa, un clavel o cualquier otra flor que les guste. Muchos,  ya ni siquiera recuerdan el perfume de estas. Ni hablar del olor a tierra mojada o de madera recién cortada...

No así, la industria cosmética,  donde cada vez mas se hace énfasis en la reproducción de aromas naturales y se lanzan al mercado con grandes campañas publicitarias,  haciendo creer a la gente que en esa botella esta contenida el aire de montaña, del rió, el campo o las flores...

Entre tanto,  vamos relegando los  maravillosos olores naturales y sustituyendo por las esencias de un frasco. Sin tomar en cuenta que no solo renunciamos al placer de oler la naturaleza,  sino también de disfrutar de espacios abiertos. Ya,  muy pocas veces vamos al campo o a la playa y  nos damos el gusto de aspirar fuerte y placenteramente de estos sitios, solo por darnos el gusto de respirar aire natural y llenar nuestros sentidos con sus colores y olores.

Estamos tan inmersos en las marcas y etiquetas que cuando queremos olor algo rico, vamos a las casas de perfumes o tiendas de cosméticos y pasamos horas deleitándonos en tal o cual marca, olvidando voluntariamente lo especial que solía ser el olor de una flor, del pasto recién cortado o simplemente la piel de nuestro bebe y lo mejor de todo, es gratis...

No quiero decir con esto que esas casas comerciales sean malas, de hecho a mi misma me encanta pasar frente a esas tiendas y disfrutar los diferentes fragancias que se desprenden de todos esos envases. Sin darnos cuenta que, al ritmo que vamos,  llegara el día que los olores naturales nos resulten desconocidos o solo los saquemos de una botella.

A mi parecer, ninguna esencia, aromatizador o perfume que coloquemos en nuestras casas podrá igualar a las flores naturales colocadas en nuestra sala o recibidor,  nada mas sublime que los olores naturales, por esto los invito a que se detengan en un espacio abierto y respiren, aspiren y disfrute de la naturaleza....